Nuestro guía en este viaje fue Ken, y sus explicaciones no solo eran claras y fáciles de entender, sino que también tenían un toque de humor que hizo que la historia y las anécdotas de cada lugar cobraran vida. Durante el recorrido, siempre se ofrecía amablemente a ayudarnos a tomar fotos, ¡y todos salíamos muy favorecidos!
Además, la habilidad de Ken al volante es de primera categoría: conduce de manera segura y fluida, lo que nos permitió disfrutar del paisaje con total tranquilidad. Sus recomendaciones de comida también fueron una grata sorpresa, tanto el almuerzo como el té de burbujas fueron excelentes y superaron nuestras expectativas.
¡Estamos muy agradecidos a Ken por su atención y dedicación, que hicieron que todo el viaje estuviera lleno de risas y recuerdos maravillosos!