Eslovaquia, una tierra llena de parques nacionales, altas montañas, ríos y arroyos, es el lugar perfecto para visitar para los entusiastas del aire libre. Los Altos Tatras son los favoritos entre los viajeros por sus pintorescas rutas de senderismo que pasan por lagos tranquilos y cristalinos que reflejan los hermosos picos montañosos que los rodean. Con largos tramos de pistas nevadas, ideales tanto para el esquí alpino como para el esquí de fondo, esta zona también es un destino popular durante el invierno. Sin embargo, no es necesario salir de la ciudad para pasar un buen rato. En Bratislava, podrás ver lugares turísticos como el Castillo de Bratislava y la Catedral de San Martín antes de pasear por el casco antiguo en busca de buena comida y cerveza.