Tuve la experiencia del Museo de Cocina Real Yuxiandu de Pekín en mi primer día en Pekín, ¡y fue la manera perfecta de empezar el viaje! El espectáculo fue absolutamente maravilloso, los bailarines eran preciosos, y me ayudó mucho que algunas partes de la historia estuvieran traducidas al inglés para poder seguirla mejor. Elegí la comida vegetariana, y aunque la mayoría de los platos estaban deliciosos, hubo uno que no estuvo del todo bien. Ojalá el chef tuviera una mayor variedad de opciones vegetarianas, me pareció un poco limitada. Dicho esto, no me puse expectativas demasiado altas con la comida, sabiendo que adaptarme a las restricciones dietéticas puede ser un desafío. Aun así, en general es una gran experiencia, especialmente si te gusta la cultura y el espectáculo. Si tienes limitaciones alimentarias, simplemente ve con la mente abierta y concéntrate en disfrutar del espectáculo. Comerás, y el ambiente lo hará merecer la pena.