Reservar entradas fue fácil, como siempre, y conseguimos un descuento. Recomiendo muchísimo el jardín de hierbas, sobre todo para quienes disfrutan de los paseos por la naturaleza. Aunque fuimos un fin de semana, las colas no eran largas. Es mejor visitarlo fuera del verano para disfrutar plenamente de las hamacas del jardín, y la caminata es bastante llevadera. Me encantó especialmente el jardín de invernadero y el relajante baño de pies. También me encantó el teleférico, que ofrece una vista de Kobe.